miércoles, 25 de febrero de 2015

La Madre Teresa de Calcuta y la Eucaristía



Madre Teresa de Calcuta: "el peor mal de nuestro tiempo es la Comunión en la mano"
Muchos conocen cual era la opinión de la Beata Madre Teresa de Calcuta frente a la comunión en la mano. Ella decía: “[...] el peor mal de nuestro tiempo es la Comunión en la mano.” (The Wanderer, 23 de marzo de 1982)


Muchos podrían haber pensado que ... para ella el peor mal, podría ser otra cosa, pero no, consideraba que lo peor en este mundo era recibir a Cristo en la mano.

En el libro “Ven, sé mi luz” sobre las cartas de la Beata de Calcuta, aparece el testimonio de una religiosa sobre la devoción que tenia Madre Teresa a la Eucaristía.
En el cap.10 dice lo siguiente:

... Una hermana que entró en los primeros años a la Congregación, testigo diario de las acciones de Madre Teresa, testificó sobre esta gran fe en la Eucaristía:

“Madre recibía la Sagrada Comunión diariamente con una devoción tremenda. Cuando algunos días se celebraba una segunda Misa en la casa Madre, trataba siempre de asistir, aunque estuviese muy ocupada. En semejantes ocasione la oía decía “que hermoso haber recibidos dos veces a Jesús hoy “. La profundísima reverencia de la Madre hacia el Santísimo Sacramento era un signo de su profunda fe en la Presencia Real de Jesús bajo la apariencia de pan y vino. Su actitud de adoración, gestos tales como las genuflexiones, incluso con las ambas rodillas en la presencia del Santísimo Sacramento expuesto, y esto hasta bien entrada en años, su manera de arrodillarse y juntar las mano, su preferencia por recibir la Sagrada Comunión en la lengua, todo ellos testimoniaba su fe en la Eucaristía.”

(Ven, sé mi luz. Ed. Planeta)

Este testimonio, confirmaría las palabras anteriores de la Madre Teresa, sobre el peor mal que hay en el mundo.

Son los santos de ayer y los de hoy los que nos muestran cómo debemos acercarnos a recibir a Nuestro Señor, debemos acercarnos con un corazón humilde y recibirlo en la lengua No en las manos y de rodillas. El testimonio de esta religiosa, recalca, que Madre Teresa al comulgar en la boca expresaba su fe en la Presencia Real.

Entonces esto nos confirma, qué al recibir la comunión en la boca por manos de sacerdotes, estamos dando fe a que Cristo, el mismo Dios esta presente en la Eucaristía y por eso no debemos tocarlo con nuestras manos que no están consagradas para tocar al mismo Dios.

De más esta decir qué no baste solamente los gestos externos, sino creer realmente en la Presencia Real y tener las disposiciones para acercarse a comulgar, aquéllas que manda nuestra Madre la Iglesia.
"¿Qué es lo único que será capaz de

convertir a América y salvar al mundo?"





"Mi respuesta es: la oración.

Lo que se necesita es que cada Parroquia

visite a Jesús en el Santísimo Sacramento
durante Horas Santas de oración"



Madre Teresa de Calcuta


Palabras de la Madre Teresa

"Es preciso impulsar vigorosamente la adoración perpetua con exposición del Santísimo Sacramento."

"Jesús se hizo para los humanos el Pan de Vida con el fin de comunicamos vida. De noche y de día, Él está allí. Si quieres que el amor crezca en ti, regresa a la Eucaristía, regresa a esa Adoración."

"Nuestra vida tiene que desarrollarse en tomo a la Sagrada Eucaristía. ... fijen los ojos en Aquél que es la luz; acérquense de corazón a Su Divino Corazón; pídanle que les conceda gracia para conocerlo, amor para amarlo, valentía para servirlo. Búsquenlo con todas sus fuerzas."

"Por intermedio de María, la causa de nuestra alegría, ustedes descubrirán que nadie en la tierra les recibirá con mayor alegría, nadie en la tierra los amará más que Jesús, que vive y que está verdaderamente presente en el Santísimo Sacramento. ... Él está ciertamente allí, en Persona, esperándolos."

"No podemos separar nuestra vida de la Eucaristía, porque si llegamos a hacerlo, en ese mismo momento algo se rompe. La gente pregunta, '¿De dónde sacan las hermanas la alegría y las fuerzas para hacer lo que hacen?' La Eucaristía no implica sólo el hecho de recibir, sino también el hecho de saciar el hambre de Cristo. Él nos dice, 'Vengan a mí', porque Él tiene hambre de almas."

"Recién en 1973, cuando empezamos nuestra Hora Santa diaria, fue que nuestra comunidad comenzó a crecer y florecer. ... En nuestra congregación solíamos tener adoración una vez a la semana durante una hora; luego en 1973 decidimos dedicar una hora diaria a la adoración. El trabajo que nos espera es enorme. Los hogares que tenemos para los indigentes enfermos y moribundos están totalmente llenos en todas partes.
Pero desde el momento que empezamos a tener una hora de adoración cada día, el amor a Jesús se hizo más íntimo en nuestro corazón, el cariño entre nosotras fue más comprensivo y el amor a los pobres se nos llenó de compasión, y así se nos ha duplicado el número de vocaciones. Dios nos ha bendecido con muchas vocaciones maravillosas. La hora que dedicamos a nuestra audiencia diaria con Dios es la parte más valiosa de todo el día."

"Las horas de adoración son horas especiales de reparación por los pecados cometidos, y de intercesión por las necesidades del mundo entero; en ellas exponemos la humanidad, que está enferma de pecado y hundida en terribles sufrimientos, a los rayos sanadores, reconfortantes y transformadores de Jesús que irradian de la Sagrada Eucaristía."

"La hora santa es nuestra oración familiar; en ella nos reunimos a rezar el Rosario ante el Santísimo expuesto durante la primera media hora; en la segunda, oramos en silencio."

Cuando le preguntaron a la Madre Teresa cuántos conventos tenía, ella respondió:
"Tenemos 584 sagrarios."

"Cuando uno contempla el crucifijo, entiende lo mucho que Jesús nos amó. Cuando uno contempla la Sagrada Hostia, entiende lo mucho que Jesús nos ama ahora. Ésta es la razón por la cual ustedes tienen que pedirle a su sacerdote que inicie la Adoración Perpetua en su parroquia. Yo le ruego a la Santa Madre que toque el corazón de los sacerdotes de todas las parroquias para que tengan la Adoración Eucarística Perpetua en sus parroquias, y que ésta pueda propagarse por el mundo entero."

"El tiempo que uno pasa con Jesús en el Santísimo Sacramento es el tiempo mejor invertido en la tierra. Cada momento que uno dedica a Jesús profundiza nuestra unión con Él y le imprime al alma un aspecto más eternamente glorioso y hermoso en el Cielo, que nos ayudará a alcanzar una paz duradera en la tierra."
Madre teresa de calcuta

No hay comentarios: